domingo, 15 de abril de 2007

La profe de religión....


Estaba chateando recién con una amiga, acerca de nuestras experiencias en un postgrado que hicimos hace ya unos años. Y me quede pensando en los diferentes personajes que cayeron en ese curso. Me explico. Imagínense un magíster en diseño y comunicación multimedia… (una wea pa ñoños publicistas y artistas del Mouse). Al inscribirme pensé que esto es para publicistas, diseñadores, arquitectos, y gente del mismo rubro. Pero al parecer estuve muy equivocado… Si estaban los que yo pensaba, pero éramos minoría.

En el proceso de “selección” de la facultad entraban desde una gran cantidad de ingenieros, contadores, podólogos, uno que otro saxofonista, un viejo que tocaba el organillo con mono y todo, un profesor de cueca, un anestesista, un travesti, un mimo, un carabinero jubilado, y muchos más. Pero lo peor de todo……..una profesora de religión de unos 50 años. Si señores como lo leen. Increíblemente el departamento de selección estudiantil aprobó el ingreso a un magíster en multimedia a una veterana de la religión!!!!!!!

Ahora lo primero que se nos viene a la mente es que al final todo era un negocio y si quería estudiar esta wea una foca que equilibra un pelota de playa, mientras tuviera las lukas estudiaba. (Ojo que la foca estaba más apta pal curso que muchos compañeros) Pero al pensar mejor esto, nos damos cuenta que a la profe de religión nadie la obligo a estudiar, sino que ella quiso hacerlo!!!!, teniendo múltiples posibilidades de ampliar su carrera, como estudiar teología, hacerse monja y evolucionar, también podía morirse e ir al cielo a hablar directamente con el Jefe, o por ultimo pololear con el cura Tato, no se. Pero no. “QUIERO ESTUDIAR MULTIMEDIA”. Multimedia, que mierda habrá pensado que era la multimedia una panti con 4 patas?????, quien sabe?

Una vez comenzadas las clases estaba yo sentado al lado de Murphy, cuando designan los grupos, para el primer trimestre del curso. – Les he de confesar que yo soy bastante Mateo, por lo general no compito en nada, pero con los estudios soy un cabrón, mi objetivo es ser el mejor-. El primer grupo estaba bueno, 1 publicista, 1 periodista y 1 diseñador. El segundo grupo más o menos, 2 diseñadores y un arquitecto. El mío, yo publicista, la profe de religión y un contador que no hablaba porque tenia ataques de pánico…
Después de maldecir al destino por más de 3 horas, trate de ver el lado positivo del cuento y de concentrarme en sobrevivir a este leve impedimento.

El primer trabajo: Casa de La Monja. 14 horas

Llego puntual como de costumbre, toco el timbre, y sale una señora mas arrugada que los cocos de un elefante a abrirme la puerta, hablándome en un dialecto que a penas entendía ya que no tenia los dientes de arriba, haciéndome pasar directamente a la pieza de su nieta.

Lo primero que observo en la pieza es un estante grande lleno de archivadores que decían 1º básico, 2º básico, etc. Luego giro y veo una cama de menos de una plaza llena, pero LLENA de los Cariñositos “Para aquellos lectores menores de 25 años, los Cariñositos eran unos bichos que cumplían el mismo papel que hoy tiene Barney”. Unos peluches muy desteñidos, llenos de polvo y con cara de estresados. Luego levanto la mirada y me fijo que el papel mural era de tonos rosados con estampados de Frutillita (otro mono ñoño de mierda de hace mas de 20 años) .En ese minuto cache que estaba en la Dimensión Desconocida y que ahí podía pasar cualquier wevada. A todo esto la dueña de casa estaba en el baño. Luego ya estupefacto observo con mayor curiosidad el museo de los 80’s y en las puertas del closet debe haber tenido unas 500 cartas o servilletas con mensajes huevones, como “el mejor regalo es el que te haces a ti mismo” y esas cosas, acompañados del típico campesinito cabezón pecoso con un gorrito de paja y descalzo.

Ya estaba a punto de salir por una ventana, cuando decidí seguir adelante (weon macho) y para distraerme mientras esperaba que la dueña de casa terminara su que hacer biológico, saque unos de los archivadores pa ver las notas de los pendejos. Pero grande fue mi impresión al ver que detrás de los archivadores en el fondo del estante habían unas botellas de copete a medio llenar y algunas vacías. Una botella de menta que le quedaban 2 centimetros, un Capel de 30 grados a la mitad y un whisky Mitjans a punto de morir. Ahí me di cuenta que estaba en la casa de la polola de Norman Bates y que tenia que salir de cualquier forma del lugar. Al colocar el archivador nuevamente en su lugar me fije que había algo rojo y estupidamente metí la mano para ver que era. Un Dildo o consolador de goma de unos 30 centímetros de largo con la forma del mono de Michelin, lleno de unos rollitos que ya se notaban gastados en el extremo superior, dando a conocer el verdadero color del aparato sin su pintura de fabrica… Ahí mi mente tomo el control y me imagine a la profe de religión en pelotas, haciéndose el barco pirata con el sufrido dildo al son de una escala musical obtenida por los rollitos del aparato contra el nudo del globo de la profe. Casi vomité.

En ese instante sentí que ella venia saliendo del baño (el ruido de la cadena) y trate de dejar todo en su lugar. Ella al verme, me saludo de un húmedo beso en la mejilla reafirmando por el aroma que traía, que estaba mal del estomago y que el baño debió haber quedado obsoleto por varias horas. A los 10 minutos llego el mudo y nos pusimos a trabajar.

Continuará.

5 comentarios:

MCH dijo...

Wow, ni Robert Rodríguez inventa algo más bizarro. Esperaré el desenlace de este novelesco episodio de vuestra dogorística vida.

Anónimo dijo...

me dio miedo!!!!

Princessa dijo...

Igual freak la historia, hay que esperar la segunda parte.

Caro dijo...

Jajajajajaja..
Mmmmmm quiero pronto leer la otra parte...Tengo la esperanza q sea todo un sueño para ti....sino, igual fuerte...

Me entretiene tu redacción....

sandra dijo...

juajuajuajua, la monja se las traía, quería estudiar multimedia para poner en internet sus videos porno!!!!
NOTA: cuando chica tuve un Cariñosito (Sueñocito)que me acompañaba para dormir, y ahora que soy grande tengo a Peludito, jeje